Aceptación o Rechazo

Lo maravilloso de todo esto que llamamos "vida", es que nuestra propia fragilidad que tratamos de ocultar ante los demás y nosotros mismos a capa y espada, se filtra a través de cualquier grieta dentro de nuestras propias personalidades, siempre están vivas, buscando arrastrarse fuera de nosotros a la más mínima provocación, llámese "un vino de más" o una medicina que baja tu control y apego, tal vez un cigarro que abre la puerta más secreta de tu alma, o bien algún tipo de droga de forma recreativa o recetada por algún médico, el verdadero fin de nuestro interior es mostrarse, sin esta pequeña premisa y promesa, la esperanza de saberte aceptado verdaderamente por los demás desaparece y nos deja completamente separados de nuestras propias emociones y de los demás, todos queremos ser aceptados, no por lo que somos por fuera, sino por lo que tememos ser y llevar dentro de nosotros, como fantasmas, como marcas, como si lo único que importara fuera ser aceptado por los demás, cuando en realidad es tan sencillo justificarnos ante cualquier pretexto para expresar lo que llevamos dentro, porque seamos honestos, es tanto lo que queremos decir que hasta cuando callamos, se escurre de nosotros hasta el punto de decirlo con subtítulos. Todos queremos ser escuchados, ser valorados, ser aceptados, la lucha es contra el rechazo, la lucha es imaginaria, nadie nunca aceptara de nosotros, lo que nosotros mismos no aceptamos. No hay salida, por más que quieras decir que no, algo dentro de ti siempre buscara la salida ante la más pequeña provocación, y eso, eso me parece formidable, fantástico, me encanta saberme frágil ante mi propia idea de fortaleza, me hace sentir tan humano, tan surreal, tan perfecto en mis imperfecciones, pero por sobré todo, tan indudablemente a merced de toda es avalancha de sensaciones y secretos tramitando su salida a este mundo.